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Un novio interrumpe su boda para actualizar sus cuentas de Twitter y Facebook
Apenas dijo el «sí, quiero» actualizó su estado civil en las redes sociales y subió a Facebook un video de la ceremonia. La adicción a Internet ya le trajo algunos problemas matrimoniales
Un poco obsesivo el muchacho, ¿no?
Ser adicto a Internet puede ser un verdadero problema. Pero también puede darte esos quince minutos de fama. Es el caso de un hombre que detuvo su casamiento (sí, su propia boda) para actualizar su estado civil en sus cuentas de Twitter y Facebook. E incluso subió en instantes un video del enlace a YouTube.
El episodio ocurrió en Maryland, Estados Unidos. En el video se ve como el hombre va metiendo las manos en el bolsillo para coger su teléfono móvil cuando el sacerdote estaba a punto de proclamar a la pareja como marido y mujer.El vídeo ha tenido más de 350.000 visitas.
«Está actualizando su estado civil en Facebook», dijo el ministro provocando la risa de los invitados. «Como estaba diciendo, os declaro marido y mujer. Es oficial en Facebook. Es oficial en mi libro. Dana, puedes besar a la novia».
«No sólo sorprendí a mis invitados, también a Tracy (su mujer) por sacar su teléfono y escribir en Facebook y Twitter desde el altar durante la boda», dijo el hombre. «Tenía el móvil preparado en el bolsillo, así que cuando ella preguntó pude explicárselo. Nadie lo sabía salvo el pastor y yo mismo», dijo en YouTube.
El recién casado es ahora tan popular que su esposa está preocupada: «No duerme».
link: http://www.youtube.com/watch?v=VSkT5XykJzo&feature=player_embedded
Un muchacho brinda su amistad por un módico precio. Si le falta uno para el partidito de fútbol, quiere ir al cine con un desconocido, o ir a tomar algo con alguien simpático, sólo tiene que contratarlo.
«Tal vez estés aburrido y solo un viernes por la noche. Entonces podrías necesitar mi servicio y comunicarte conmigo. Desde jugar a la Playstation hasta tomar unos tragos en un bar o salir a bailar a un boliche», así lo explica el joven, que inaugura una nueva línea de negocios: la venta de amistad. El muchacho se apura a aclarar que no brinda ningún tipo de servicio sexual, sin excepción.
Su área de cobertura se centra en la ciudad de Córdoba, Argentina, pero dependiendo de la propuesta estaría dispuesto a viajar.
Si Ud. busca un amigo -que en definitiva le va a salir mucho más barato que la mayoría de sus amigos verdaderos- para tomar unas copas o ir al cine, aproveche esta oferta.
Una mujer rescató a su marido del ataque de un tigre furioso armada con un cucharón.
Cuando Tambun Dedin cazaba ardillas en su aldea, en la región septentrional de Malasia, fue atacado por un tigre. Afortunadamente para el hombre, su esposa Han Besau, de 55 años, escuchó los gritos y fue en su ayuda.
Armada con una cuchara grande de madera para servir sopa le asestó un fuerte golpe al animal en la cabeza. Esto asustó a la bestia y milagrosamente salió a la carrera. Desde el hospital donde se recupera de las heridas, Tambun relató el suceso: «Luché para mantener su boca lejos de mí, lo golpeaba en la cara pero eso no lo detuvo. Me hubiera matado de no haber sido por la llegada de mi esposa».
Al parecer, Tambun llegó a ver al tigre aproximándose e intentó subirse a un árbol pero el enorme felino lo atrapó y lo lanzó al suelo donde presumiblemente planeaba desayunárselo.
Las autoridades de vida silvestre malaya se hallan en la tarea de encontrar al tigre y llevarlo a una zona más profunda de la selva para que no sea una amenaza para la gente.
Se propuso visitar cara a cara a sus 325 contactos.
ArLynn Presser, un señora de 51 años, residente de Illinois, Estados Unidos, y que padece agorafobia (un trastorno de ansiedad que consiste sufrir un temor intenso a los espacios abiertos o públicos en los que pueden presentarse aglomeraciones) se prometió a sí misma salir de su casa y visitar a cada uno de sus 325 amigos de Facebook.
Fue así como el 31 de diciembre de 2010 comenzó a planificar la tarea y abrió un blog para ir plasmando las experiencias hasta conseguir su objetivo: conocer personalmente a sus amigos virtuales. Un año después, Presser ya se había encontrado con el 90% de los amigos a los que se había propuesto visitar, llegando a 51 ciudades de 13 países y habiendo tomado 39 vuelos.
«Llegó un momento en que me di cuenta que estaba pasando mucho tiempo sola, frente a la computadora», declaró ArLynn. «Me costó, pero tenía que hacer un cambio drástico en mi vida, y estoy a punto de conseguir lo que me había propuesto».
Un buen ejemplo para dejar el mundo virtual y conocer cara a cara a la gente, ¿no?
Ariel Valdes